Introducción y bienvenida

F. Rafael RODRIGUES SANTOS omv

Nos complace dar la bienvenida a Rafael, religioso oblato de la Virgen María de Minas Gerais, estado del sureste de Brasil, vecino de São Paulo. Es el mayor de dos hermanos y creció en una familia sencilla y profundamente religiosa. Sus padres, con gran confianza, siempre dicen que están felices y orgullosos de ver a su hijo elegir entregarse totalmente al Señor en la vida religiosa. Su apoyo discreto y su alegría son para él un testimonio precioso, arraigado en la fe.

Tras un periodo de prueba, el postulantado, Rafael hizo el noviciado en Italia en 2022, una experiencia fundamental que le permitió vivir intensamente la escuela del Evangelio según el espíritu de nuestra Congregación. El 11 de enero de 2023, emitió sus primeros votos, marcando su deseo de seguir a Cristo pobre, casto y obediente a la manera de María. Hoy continuará sus estudios teológicos con nosotros en el Colegio de los Bernardinos de París, mientras vive entre nosotros la última etapa que le conducirá, a su debido tiempo, a la consagración definitiva mediante los votos perpetuos.

Con mucha seriedad y perseverancia, Rafael estudió la lengua francesa y ahora la habla con brillantez. Para él, este don de la lengua no es sólo un instrumento de integración cultural, sino también un medio de profundizar en su misión: anunciar el Evangelio y compartir la riqueza de su vocación con claridad y profundidad.

Su trayectoria vocacional está marcada por una profunda humanidad. Antes de unirse a los Oblatos, estuvo al servicio de los pobres de la calle, compartiendo con ellos su vida cotidiana, sus dificultades y sus esperanzas. Esta cercanía a los más vulnerables, vivida con sencillez y entrega, modeló su corazón misionero y sigue inspirando su modo de ser hermano y servidor de todos.

Además de este compromiso con los excluidos, Rafael posee una riqueza interior y unos talentos que contribuyen a la belleza de la vida fraterna: le encanta la música, toca la guitarra y canta con sensibilidad. Estos dones, que reflejan la alegría del Evangelio, son una oportunidad para que nuestra comunidad descubra la diversidad y la fecundidad del Espíritu a través de él.

Acoger a Rafael significa acoger a un hermano en camino, un testigo de la fidelidad de Dios, y al mismo tiempo una promesa para nuestra Congregación. Queremos compartir con él las etapas de su preparación, animarle en su camino hacia el compromiso definitivo y dejarnos estimular por su generosidad y su fervor.

Como comunidad de fe que formamos juntos, tenemos la responsabilidad y la gracia de apoyarle en la oración, de acompañarle fraternalmente y de caminar con él. Juntos, pedimos al Señor, por intercesión de la Virgen María, que le sostenga en su vocación, y nos comprometemos a rezar por él y con él, para que un día llegue a ser un oblato de pleno derecho, al servicio de la Iglesia y del mundo.

P. François Lapointe omv

Rector de la comunidad y santuario

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